Un Portal al Cielo


...en cada decisión que tomas estás eligiendo entre un resentimiento y un milagro... UCDM



16 dic 2010

ALMAS GEMELAS

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ALMAS GEMELAS

Cuando nos fuimos a dar una vuelta creyéndonos los amos separados de la Fuente fabricamos toda una suerte de universos físicos intentando demostrar cuan grandes éramos. Esa separación fue un visto y no visto, yo la imagino como la burbuja que sale y vuelve de la puerta estelar de la película Stargate.

En la Fuente no existe el tiempo ni el espacio, lo fabricamos nosotros para poder ver lo que pasó y representa que estamos viendo una película con todo lo que hicimos para volver a casa. En este lio hicimos pactos para poder desandar el camino y deshacer lo hecho. Nos creímos que habíamos pecado por querer experimentar cuando de hecho esto no es posible dentro de la Fuente. No pasó nada, fue una especie de micronanosegundo, nada, dentro de la eternidad, pero ahora lo recordamos-soñamos dentro de la Mente de la Fuente, dormidos.

En nuestro montaje hicimos pactos para ayudarnos a volver a casa y aquí, en nuestro concepto de separación y dualidad, fabricamos el alma gemela. Esta alma gemela es la que nos ha permitido a lo largo de nuestras encarnaciones experimentar todos los lados del prisma de nuestra existencia. Ha sido nuestro marido, mujer, hijo, hija, padre, madre, víctima, victimario, maestro, profesor, alumno, la hemos asesinado y nos ha asesinado, en definitiva, como cada uno de nosotros, ha hecho todos los papeles posibles en esta experiencia, los hemos compartido y alternado. A veces no ha encarnado y ha sido nuestro soporte desde otro plano, como nosotros hemos sido el suyo.

Sólo tenemos un alma gemela y 32 almas afines. Como la corona de un brillante. Eso fue lo que me explicaron en un taller de almas gemelas. Las almas afines son como una especie de soportes que nos fabricamos para salir de este embrollo de la tercera dimensión dual. Pero en definitiva esto es poner límites porque nos creemos limitados. En realidad como Seres no tenemos límites y no hace falta encorsetarnos en creencias limitantes duales.

Y aquí voy, a la dualidad. La dualidad es de esta tercera dimensión. 

Bueno-malo, bonito-feo, arriba-abajo, día-noche, derecha-izquierda, hombre-mujer, cielo-infierno (alguien inventó el purgatorio como vía intermedia (es una ironía mía) pero que era peor que el infierno porque de allí tampoco salías muy bien parado), norte-sur, pobre-rico, luz-oscuridad, vida-muerte, angel-demonio. Nos pasamos la vida tratando de alcanzar un punto y huyendo del otro.

Para trascender la tercera dimensión tenemos que olvidarnos de la dualidad, del tiempo y el espacio, pasar a tener conciencia de que una alma gemela es otra dualidad. Nuestra alma gemela es todos los demás que están en nuestro mismo camino y deseo de volver a casa. Somos parte de un todo único que unifica nuestros corazones, nuestras mentes y nuestra voluntad, esa es el alma gemela. Tenemos una conciencia global y todos vamos a lo mismo, tan importante es lo que decimos que representa el alma gemela o las afines, para nuestra evolución espiritual, como el resto de los mortales que parece que nos fastidian y nos ponen trabas. Así lo inventamos en nuestra locura demente de separación

 Decidimos que aquí tendríamos esos soportes para evolucionar hacia la Luz pero hasta que no tenemos la certeza, el sentimiento y la experiencia y nos hemos dado de bruces cien mil veces (o más) no aprendemos que de nada sirven todos los inventos que podamos fabricar. Ya estamos en casa y solo recordamos como fue el experimento, esto solo es el recuerdo soñado.

Precisamente aprendemos de estos seres que creemos que nos fastidian, provocan y ponen trabas porque son el espejo donde ver nuestras limitaciones. Lo que está en el otro no es mío, nos decimos, y esencialmente es todo lo contrario. Todo lo que vemos en los demás y no nos gusta, todo lo que sentimos como rechazo porque nos repele, toda acción, idea, creencia que criticamos es algo que llevamos dentro y no nos gusta de nosotros y lo reprochamos en los demás porque nos lo reprochamos en nosotros mismos, porque de esa manera parece como si no fuera nuestro. Es otra faceta de la dualidad no aceptar que algo que nos resulta desagradable fuera lo tenemos en nuestro interior, porque si lo aceptamos nos creemos malos y no queremos eso, pero de hecho eso no hace más que fortalecer nuestra creencia limitante y de separación del otro. Es un pez que se muerde la cola. Cuanto más me separo del otro más veo sus defectos (que son los míos) y más separado me siento, con lo cual nunca llegaremos a verlo como una ser tan atormentado como el nuestro en su deseo de volver a la Fuente.


¿Alma gemela? Sí, mi alma gemela eres tú que me enseñas cada día a ver que lo que no me gusta de ti es algo que tengo que mirar en mi interior y perdonarte, agradecerte y amarte porque te he puesto en mi camino para que me diera cuenta, así me perdono, me agradezco y me quiero. ¡Cuando lo haya conseguido con todos… nos vemos en casa! :)

Namasté
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1 comentario:

  1. Mmmm has tocado una cuestión que últimamente me lleva de cabeza...pensando en el libro "Las familias de almas"...otro embrollo en mi cabeza...hace tiempo que no sé cómo interpretar lo que dice el libro...

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